martes, 31 de marzo de 2009

¿And Now?

Lamento desilusionarlos (me).

El día despues en la oficina no tuvo nada de especial. Nada.

Tampoco hubo llamado telefónico, ni nada que se le parezca un poco.



Solo esta mañana atinó a decirme "cómo me gusta tu perfume"

Oh, si! La ira comienza a asomar...

lunes, 30 de marzo de 2009

Detalles



EL LLAMADO
Llegar, llegó. Aunque con desvío:
La llamó a N.
Dijo que pasó por casa y no me vio (¿wtf ? ¿tiene Rayos x? ) y supuso que estaría con ella.
Supuso bien, pero no logro entender , por qué no marcó mi número en lugar del suyo.

EL MOTIVO
Vino seguido de su cuasi- confesión y mis ojos abiertos gigantescamente:
En realidad fue una sumatoria de cosas, actitudes mías que le fueron molestando hasta llegar al punto de la decepción. Porque de mi esperaba otra cosa. Porque a mi no me quería como a una amiga.

LA PREGUNTA
La encaró por el lado de mis nervios (claro, yo no podía mas)
¿Por qué te pones tan nerviosa? ¿Por qué no me podes mirar? ¿Qué te pasa conmigo?


LA RESPUESTA
Costó horrores que salga.
Desde siempre, todo lo extrovertida y verborrágica que soy en lo cotidiano, se transforma en estupidez y mutismo en cuestiones del amor. Pero nunca me había costado TANTO.
Hasta que pude decirle que me pongo nerviosa porque lo que me pasa con él es raro. Que en realidad no es raro lo que siento en sí, sino que no lo esperaba (si, lo mareé un poco). Que es reciente y que me da miedo. Que me pasan cosas con él.

EL BESO
No fue automático. Al escucharme solo me miraba y se reía. Yo todavía no lograba mirarlo a los ojos.
Se vino un abrazo fuerte, largo y hermoso.
Bastó que le agradeciera por su paciencia, para que me diera el beso mas tierno.
Seguido de muchos, dejando entrever, que eran mas que esperados.



.

domingo, 29 de marzo de 2009

¿what?

Después de la primer charla, en el trabajo hablábamos, pero no mucho. Por lo cuál en estos días se dedicó a hostigarme vía msn:


“ todavía no me contestaste un par de cositas que te pregunte el otro día”

“¿pero de que forma me querés?”

“al final no me terminas de decir las cosas”

“ayer me dejaste con muchas dudas”

“pero me vas a decir todo, no te vas a quedar con nada ¿no?

“me gustaría que fuera mas que un ratito”

“pero si sé lo quiero ...... y vos?”


Las (mis) expectativas y ansias incrementaron en demasía.
Ustedes saben lo que me costó llegar hasta acá. Aceptar. Avanzar. Jugar.

Pero parece que el miedo no abundaba solo en mi.
Las cosas se dieron bastante raras y me dejaron de la misma forma.
No rebalso de felicidad.
No me arrepiento.
Solo estoy rara.

Quizá se deba a que cuando me dejó en la puerta de casa, solo atinó a decir “Nos vemos el Lunes”







Todo Llega (la incertidumbre también)

Llegó el llamado telefónico.
Llegó el motivo de su enojo.
Llegó su pregunta.
Llegó mi respuesta.
Llegó el beso.



¿y ahora? ¿qué carajo hago mañana en la oficina?

miércoles, 25 de marzo de 2009

Guardando el tiempo en cajas viejas

Y como quien no quiere la cosa y casi por casualidad (claro), nos juntamos en lo de N a comer una picada.

Y gracias a mi insistencia volví a abrazarlo. Mucho. Muy fuerte. Como para no dejarlo ir nunca mas.
Hablamos, principalmente, de como habíamos pasado ambos estos meses en los que fuimos ¿dos extraños?

Lo que todavía no me dijo, es el motivo de su enojo.
Calculo que a modo de castigo, porque lo increpé severamente para hablar. Con un cuchillo en la mano, hubiera sido amenaza.

Lo lindo es que sentí que el tiempo no había pasado. Volvimos a estar ahí, en el lugar de siempre, donde pasamos tantas noches y tantas cervezas.
Riendo a carcajadas. Mimandonos mucho.
Si, Mucho.
Rayando la histeria (thanks Cookina), de forma peligrosa.

Felicidad extrema + impulsividad + Cerveza + Pipona, no son una buena combinación.

No hice confesiones de las cuales pueda arrepentirme, pero dejé dudas.
Dudas que no deberían haber sido traspasadas. Porque son mías y son eso.

El problema es que ahora él quiere saber.
El problema es que yo también.
Me pregunta de qué forma lo quiero; y yo me pregunto lo mismo.

Me invade el miedo. Quiero actuar con cautela y no puedo. Mi ansiedad e impaciencia me lo impiden.
Mis miedos y fantasmas del pasado, no me permiten ver con claridad.

Sé que tengo que hacer las cosas bien. No quiero perderlo una vez mas. No quiero que ninguno salga lastimado.
No sé que camino tomar y el eco de esa pregunta dando vueltas en mi cabeza ,no ayuda en lo mas mínimo.

"¿ de qué forma querés que sea parte de tu vida?"

Supongo que la respuesta la tendrá el gran bonete, porque en mi, no la encuentro.

jueves, 19 de marzo de 2009

Te LLueven 30 Limones! (No, no volcó otro camión en la autopista)

Porque me tiene de cábala...
y necesita hablar conmigo antes de ir a rendir exámenes dificilísimos, para los que casi ni estudió y se saca un radiante 8.


Porque tiene bien en claro sus conceptos...
-(P.L): pero me sonó el reloj 8.42
-(P.L): porque le dije que a mi eso de 840 no me iba.

Porque me da buenos consejos...
-Santa Pipona: no, tampoco tanto, sino que hago?
-(P.L): :anótate en una pile
-(P.L): y... nada!

Porque me ahuyenta los malos pensamientos...
-(S.P): hoy me paso lo peor q me pudo haber pasado, me pase la mañana convencida q era viernes
(S.P): q feo momento en el q descubrí q era miércoles
-(P.L): mira el lado bueno
-(P.L): tenes semana con dos viernes

Porque tiene su propia filosofía...
(P.L): es como dice un amigo: si estudias fumado tenes que ir a rendir de faso
(P.L): yo digo q me tomo un fernecito antes del examen y to piola!


Porque siente mas o menos así...
y poso su mano sobre mi hombro, como una hoja que venia con el viento... y se deslizo sobre mi pecho hasta llegar a mis caderas y ahí descubrí su sonrisa franca y tierna,,, y me sentí como en casa, la abrace y así comprendí que la felicidad puede durar solo un instante, solo hay que estar ahí y animarse a vivir

Y Porque en breve terminaran nuestros chateos y volveremos al face to face.


Brindo con vos a la distancia, porque ferné + motivo= happy hour.
Feliz cumple Primo Limón, ámolo en enormes cantidades.



sábado, 14 de marzo de 2009

Nada es para siempre

Un par de días antes de fin de año, estaba en la casa de mi amiga N y llega él.
Yo estaba cocinando. Entró, no me saludó, y se pasó la noche entera sin dirigirme la palabra. Cuando se fue, también me pasó por alto.
Esa fue la primera vez, desde que me había negado el saludo en la oficina, que lo veía fuera de ella.
La segunda fue bastante especial. A saber: Santa Pipona odia los corsos.
Detesta a los gurrumines corriendo y tirando espumita; pero hace un par de semanas atrás, a Pipona no le importó nada y aprovechó la llegada al barrio de su murga.
Si. Mi (ex) amigo F, es murguero de alma y desde siempre; en el tiempo en que fuimos amigos jamás lo fui a ver.
Pero en este tiempo de no- amistad, todo vale.
Y ahí estaba yo. Sorprendiéndome, cuando se me llenaron los ojos de lágrimas al escucharlo cantar. Siendo feliz al recibir espuma en mi radiante flequillo, por parte de algún purrete.
Mi amiga N (al pie del cañón, siempre), desconcertada ante mis ojos llorosos, lo saludó entre la multitud. Mi (ex) amigo F le devuelve el saludo con una inmensa sonrisa.
Y me pasa por alto una vez mas.

Acostumbrada a su rechazo- dentro y fuera de la oficina- esta tarde, cuando llamó a N y le avisó que pasaba a dejarle un libro, (aunque mi primer deseo fue convertirme en superman para volar y desaparecer automáticamente), decidí quedarme y afrontar una vez mas su no- saludo.
Si bien, hace cinco meses que lo vivo día a día en la oficina, sería la primera vez sintiendo lo que siento (¿qué siento? Todavía no lo puedo creer).
Y de repente lo veo venir. Camina, se acerca.
La saluda a N
Y me saluda a mi.
What? Me está saludando? Mai gat. El cuerpo tiembla y las palabras quieren salir todas juntas.
Es ahora o nunca.
-Pipona (sabiendo que estaba apurado): sé que ahora no podés, pero nos podemos juntar para charlar?
-F (seriedad absoluta): Si, podemos.
-Pipona (respirando feliz): bueno, ¿cómo hacemos para arreglar?, porque vos en la oficina no me hablás (te lo diiiiijeee)
F: ….
F:….
Pipona: Me llamás?
F (sonrisa, seria, pero sonrisa al fin): Si, quedáte tranquila que yo te llamo y arreglamos.
Y el alma me volvió al cuerpo. Después de cinco meses, porto una sonrisa increíble.
Nunca tuve tantas ganas de que llegue el lunes para ir a trabajar.
Sé que no me va a saludar, pero esta vez lo entiendo y lo prefiero.
Se que el día que todos vean que nos volvemos a hablar, va a haber revuelo (ya somos la novela de la oficina); y sin charla previa, no estaría bueno.
Sé que va a tardar en llamarme, pero sé que me va llamar.
Sé que voy a volver a abrazarlo fuerte fuerte como antes.
Pero lo que no sé, es que carajo voy a hacer, con mis nuevos sentimientos para con él.

martes, 10 de marzo de 2009

Composición -Tema: Mi (ex) amigo F.

Las cosas no cambiaron mucho en este tiempo. (O si).
Durante mis vacaciones preguntó por mi, pero a mi regreso (y hasta el día de hoy), no hubo saludo, ni inmutación si quiera, de su parte.

-“Mucha agua bajo el puente, pasó”- dijo en forma de chiste esta mañana, cuando mi compañera preguntó porque había llegado tarde. Veinte minutos después lo vi irse y me quedé preocupada.
Y si. Pasó mucha agua bajo el puente, es cierto.
Para él y para mi.
Lástima que esas aguas, hayan tomado distintos cursos.
Y así fue como después de tanto tiempo; después de su largo e insistente silencio; y después de que tanto Ustedes, como muchas personas que me rodean lo supieran de antemano: Pipona se dio por aludida.
Finalmente y muy a mi pesar, lo estoy asumiendo.
Estoy en eso, en pleno proceso.
Deglutiendo, que lo que extraño , no es precisamente su amistad.