Creo que desde que tenía 15 años que no me sentía así. A decir verdad, no lo sé.
Cuando uno está atravesando una mala etapa, siempre piensa que es la peor que le tocó vivir. Si me pongo a pensar un poco, ésta etapa, no es la peor ni por asomo.
No soy una mina con suerte, a mi corta edad, me tocaron vivir muchas cosas; esas que duelen mucho y te hacen crecer de golpe…y la verdad que ésta vez no son tantos los problemas. En mi casa está todo milagrosamente bien, tengo trabajo, la posibilidad de estar cursando una carrera y gente hermosa a mi alrededor , esa que está cuando uno necesita.
…sin embargo, me siento sobrepasada y me da un poco de miedo. Me siento tan mal, como a los 15 años, cuando no sabía para donde carajo correr; cuando una mañana me levanté con 27 kilos menos (juro que no recuerdo la etapa en la que iba bajando de peso); y estaba flaca y linda y creí que entonces podía comerme el mundo. En poco menos de dos meses el mundo me comió a mi. Empezó con la muerte de mi perra, esa que habían traído a casa para llenar el vacío de la separación de mis viejos, cuando yo tenía cinco años…esa que tanto amaba.
De ahí en más, empezó a desmoronarse todo: Perdimos la casa en la que vivíamos, abandoné el secundario, se suicidó una amiga mía…demasiadas pérdidas. Mi peso, Mi perra, Mi casa, Mi educación, Mi amiga…el saldo era claramente acreedor.
Recordando todo esto; realmente no entiendo como puedo sentirme tan mal…pero tengo otra vez esa enorme sensación de estar perdida; de no saber, una vez más, para donde correr. Me despierto cansada y triste; y me acuesto del mismo modo. El mismo que a los 15 años…y eso, repito, me da miedo.
2 comentarios:
2 cosas:
- Siempre se puede estar peor....
- Las patadas en el culo, empjan para adelante....
Abrazo energetico, sonrisa y Beso
Pebeta...!
Me puso mal leerte así.
Seguiré leyendo el blog a ver si entiendo la causa de tanta tristeza.
Un beso.
Publicar un comentario